El colegio nacional de San Andres de Giles es sin dudas un monumento emblemático de la ciudad. La gran cantidad de alumnos que alberga, como asi tambien los servicios educativos amplaidos en los ultimos años, obligaba a una ampliacion del enorme edificio.
Así fue que en el año 2014, la entonces senadora provincial Marina Moretti, anuncio la obra de ampliación del edificio, junto con la del jardín y la de la escuela de Cucullu. Obras que comenzaron y que quedaron interrumpidas luego que cambiara el gobierno a manos de CAMBIEMOS.
Tres años de negociaciones se necesitaron para que la situacion se destrabara y el municipio pudiera hacerse cargo de la finalizacion del la obra del colegio nacional, frente a las dilaciones de las autoridades educativas de la provincia de Buenos Aires. De esta manera, con fondos del fondo educativo la obra recomenzo y esta cerca de finalizarse.
El edificio del mítico colegio, fue declarado como «Lugar Significativo» y en sus considerandos la ordenanza expresa que «El valor patrimonial de la Escuela Normal Superior “Fray Mamerto Esquiú” se tiene en cuenta desde una perspectiva histórica, cultural y educativa. Que fue la primera Escuela Secundaria Oficial y la primera oferta de Formación Terciaria del distrito de San Andrés de Giles constituyéndose en referente de la región sobre todo para Carmen de Areco y San Antonio de Areco. Que sus orígenes y desarrollo temporal están ligados particularmente con la historia nacional a través de la figura de Héctor J. Cámpora que gestionó, siendo Presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, su oficialización como Colegio Nacional el 05 de julio de 1948 y la construcción del edificio actual que se inauguró el 05 de septiembre»
Por eso sorprende que el proyecto directamente destruyera la fachada del histórico edificio, incluyendo todo un sector de reboque que choca violentamente con la fachada de ladrillo vista del edificio. Si realmente se quiere conservar el patrimonio se haya permitido esta destrucción del mismo cambiándole totalmente la estética de su fachada.
Es de esperar que si en verdad se pretende proteger el patrimonio, no se permitan mas estas aberraciones arquitectónicas que no respetan la historia de los lugares emblemáticos de nuestra ciudad.