Desde la semana pasada rige el pase sanitario en la provincia de Buenos Aires, comprende la prohibición de entrar a eventos masivos como así también la entrada a edificios públicos y tramitaciones provinciales y municipales. Esta ultima exigencia provoco mas de un encontronazo en la entrada del palacio municipal «hasta la denuncia de un vecino por una supuesta “coartación de su libertad” .
Sin embargo, el pasaporte sanitario también impulso que muchos que no se habían vacunado o habían discontinuado la vacunación, se llegaran al vacunatorio a inocularse. Entre el 27 de diciembre y el 29 de diciembre 180 gilenses se colocaron la primera dosis de vacuna, mientras que 205 completaron el esquema con la segunda dosis. La aparición violenta de la tercera ola hará seguramente que las complicaciones para los “no vacunados” se amplíen y cada vez más se decidan a protegerse y a proteger.